En ésta oportunidad voy a mostrarles las consecuencias dejadas por el gran tornado que asoló gran parte del Gran Buenos Aires, lugar en el que está ubicada la ciudad de Morón. Pero antes de pasar a las fotografías vamos a hablar un poco de qué trató esta inmensa tormenta ocurrida en la noche del 4 de marzo de 2012. La localidad de Morón, como ya hemos dicho, se encuentra dentro de lo que llamamos Gran Buenos Aires y a su vez Buenos Aires es el nombre de la provincia que integra junto a otras lo que se llama el enorme Pasillo de los Tornados. Este abarca las provincias argentinas de Entre Ríos, Centro y sur de Santa Fe, centro y este de la Córdoba, sur, centro y norte de Buenos Aires, La Pampa, sureste de Santiago del Estero, centro y este de Formosa y del Chaco, Misiones, Corrientes, la República Oriental del Uruguay, los estados sureños de Río Grande del Sur, São Paulo, Paraná y Santa Catarina en la República Federal de Brasil, sur de los departamentos de paraguay en Ñeembucú, Itapúa y Misiones. La región está considerada como la segunda en frecuencia de tornados en América y en el mundo.
Pero veamos algunos antecedentes de tornados de éste sector de Latinoamérica antes de pasar al que nos referimos en éste artículo en particular.
El Pasillo de los Tornados cuenta con mucha historia en fenómenos severos. Casos fatales como el Tornado de San Justo en Santa Fe en el año 1973 que mató a 63 personas y generó daños millonarios, catalogado como tornado EF5 y considerado como el peor tornado de Sudamérica y Latinoamérica y el Caribe con vientos que superaron los 500 km por hora. Aún así, este siniestro afectó principalmente zonas rurales por lo cual habría habido mayor cantidad de muertes y daños si hubiese golpeado directamente a San Justo. En la ciudad de Encarnación en Paraguay el 20 de septiembre de 1926, un terrorífico tornado se abatió sobre la ciudad, dejando a su paso destrucción, lágrimas y muerte. Mató a 400 personas, siendo el tornado más mortífero de Latinoamérica y el Caribe hasta la actualidad, no hay información de cual ha sido la velocidad del viento ni la escala, pero se estima que se trató de un tornado violento, de categoría EF4 o EF5.
El tornado que asoló al estado de São Paulo en 2004, fue uno de los más destructivos en ese estado. Un motor y varios edificios en la Setúbal industriales, quedaron totalmente destruidos, junto con 400 casas, 1 muerto y 11 heridos el tornado fue clasificado como EF3, pero muchos reclaman que ha sido un tornado EF4. Otro caso catastrófico ocurrió en San Pedro, Misiones en la noche del 7 de septiembre del 2009, en la que un violento tornado EF4 asoló al Municipio matando a 11 personas, mientras tanto en Santa Catarina el mismo tornado afectó la localidad de Guaraciaba matando a 6 personas, generando daños millonarios. Las localidades vecinas Santo Veloso y Santa Cecilia se vieron seriamente dañadas y fueron declaradas en estado de emergencia, aún así otros siniestros de menor intensidad, tornados EF1 Y EF2 que produjeron daños considerables, afectaron Colonia Santa Rosa, Tobuna y Pozo Azul en Misiones, no hay datos de la cantidad de tornados que se generaron en Misiones y Santa Catarina esa noche. En noviembre del mismo año, 4 tornados de categoría EF1 y EF2 alcanzaron Posadas generando serios destrozos en la ciudad, tres de esos tornados afectaron la zona del aeropuerto produciendo daños en Barrio Belén. Otro fenómeno severo ocurrió en Pozo del Tigre en el centro de la provincia de Formosa en Octubre de 2010, matando a 6 personas. El tornado fue clasificado como EF2, cercano a un EF3. La cantidad de muertes y heridos se debió principalmente a que afectó las construcciones precarias de la pequeña ciudad.
Morón, ubicado como ya hemos dicho, en la provincia de Buenos Aires, sufrió grandes consecuencias, entre las que encontramos falta de suministro de luz, calles cortadas por árboles caidos, techos enteros arrancados por el viento y arrojados varios cientos de metros, inundaciones, tapas de tanques de agua arrojados por las violentas ráfagas de viento, chapas tiradas en patios de casas, cascos de obreros tirados por todos lados y, gente asustada y herida, personas que perdieron gran parte de sus viviendas al caérseles encima los árboles de sus veredas o de sus patios.
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